El japonés Miroku vivió este momento desagradable cuando estaba practicado el deporte en el río Tone, en la región de Kanto. Parece que el impacto fue tan doloroso, que el pobre esquiador soltó la cuerda y cayó en el agua.
No obstante, fue el propio Miroku quien subió la grabación del desafortunado momento a las redes sociales.