La grabación de las cámaras de vigilancia muestra cómo las personas se dispersan en diferentes direcciones tratando de esquivar los escombros.
Los lesionados fueron atendidos inmediatamente y como no hubo heridos de gravedad, los pasajeros prefirieron abordar sus vuelos. La responsabilidad del derrumbe la aceptará el contratista.
El aeropuerto de Supadio ha estado ampliando su capacidad desde 2011 para servir a 3,8 millones de pasajeros al año.