Debido a sus características, este tipo de buldócer 'volvió a la vida' a partir del año 2012, cuando los trabajos de desescombro posteriores al tsunami que azotó el país asiático hicieron que se reclamaran de nuevo sus servicios.
El nuevo modelo es capaz de realizar trabajos de contrucción bajo el agua a profundidades de hasta siete metros. Además, dispone de un sistema de control remoto y es capaz de operar durante largos periodos sin precisar un tiempo de 'reposo'.
Mire cómo trabaja este buldócer bajo las aguas de un puerto después de una fuerte tormenta.