Una fragata rusa prueba sus nuevas armas durante unos ejercicios

La modernizada fragata Mariscal Shaposhnikov, integrante de la Flota Rusa del Pacífico, se encuentra en la última fase de las pruebas de fábrica en las aguas del mar de Japón.

En la etapa actual, la tripulación junto con los representantes de la industria han comenzado a probar las nuevas armas instaladas en la fragata, reveló el Ministerio de Defensa.

La Mariscal Shaposhnikov realizó una serie de disparos de artillería con sus nuevos sistemas de armas a objetivos aéreos y marítimos. Primero se usó el cañón naval A-190 de cien milímetros con una torreta de tecnología de sigilo. Es capaz de disparar 80 rondas por minuto con un alcance máximo de 21 kilómetros. 

Asimismo se probó el sistema de artillería antiaérea AK-630 instalado durante la modernización. La ametralladora de seis cañones de 30 milímetros realiza hasta 5.000 disparos minuto y puede destruir el casco de un misil, avión o barco que se aproxima.

Además, la tripulación disparó proyectiles de radar que crean falsos objetivos en los sistemas de guía de un supuesto enemigo, lo que permite desviar el fuego de la nave.

La etapa final de las pruebas incluyó lanzamientos desde los sistemas de misiles de ataque Uran y Kalibr.

La Mariscal Shaposhnikov fue construida originalmente como un gran barco antisubmarino (proyecto 1155). Como resultado de la profunda modernización, fue reclasificada como fragata, es decir, como un buque multipropósito para luchar contra objetivos tanto submarinos como de superficie. Fue puesta en servicio en 1985.

"Se comprobaron las características de velocidad de la fragata, así como el trabajo del motor principal (…) En esta etapa, ya pasamos a probar el armamento, el equipo de guía y rastreo", explicó Serguéi Migachev, el principal especialista en reparación y modernización de fragata Mariscal Shaposhnikov.