El T-34, fabricado en diversas versiones desde 1940, es el carro de combate más conocido de la Segunda Guerra Mundial. Fue el principal tanque del Ejército Rojo hasta mediados de 1944, cuando entró en servicio el nuevo modelo, el T-34-85.
La máquina ideada por Koshkin se destacaba por su potente cañón, excelente agilidad y un blindaje inclinado impenetrable para los proyectiles alemanes. Otra ventaja del T-34 era la sencillez de su construcción, la cual facilitó su fabricación en serie.
La creación del T-34 le sirvió en bandeja a Koshkin el Premio del Estado de la URSS en 1942, concedido de forma póstuma. Este premio era considerado el principal honor de la Unión Soviética y se otorgaba anualmente a individuos que hubiesen alcanzado grandes logros en los campos de las ciencias, matemáticas, literatura, artes y arquitectura.