Los equipos de pontoneros posibilitaron el traslado de las unidades de asalto y el material correspondiente a la periferia norte de Deir Ezzor. Una vez creado un perímetro de seguridad, de tres kilómetros de ancho, se trasladaron a la otra orilla los refuerzos de infantería y el material pesado.
Al llegar al Éufrates, el Ejército sirio cortó la principal vía por la que los terroristas recibían pertrechos.
En los días previos, las tropas sirias vencieron la resistencia de los yihadistas cerca del aeródromo de Deir Ezzor y desmantelaron el cerco en el que mantenían la base aérea desde enero pasado.
El Ejército sirio liberó el poblado de Jafrah, al noreste del aeródromo, el pasado 17 de septiembre.