Desde mediados de octubre de 2019 Panamá vive sumido en manifestaciones surgidas a raíz de la decisión del presidente panameño, Juan Carlos Varela, de adoptar cambios en la constitución.
Entre las modificaciones de la Carta Magna que causaron polémica y que están siendo rechazadas por la ciudadanía figuran el veto a las personas del mismo sexo a contraer matrimonio y la privatización de la educación superior.
Los cambios propuestos han hecho que miles de personas salgan a la calle a protestar. Algunas de las manifestaciones se volvieron violentas después de que se lanzasen piedras y botellas y se incendiara una palmera. Para controlar la situación, los antidisturbio emplearon gas lacrimógeno.