Un avión de pasajeros con 78 personas a bordo se incendió el 5 de mayo al realizar un aterrizaje de emergencia en el aeropuerto Sheremétievo de Moscú. La aeronave tuvo que regresar al aeropuerto 28 minutos después de despegar.
Más de 40 pasajeros murieron en el siniestro.
El avión viajaba a Múrmansk, en el noroeste de Rusia.