Las fuentes del medio, que desearon mantener el anonimato, informaron que en vez de ello los teléfonos móviles serán equipados con un nuevo sistema tridimensional que detecta el rostro del propietario.
Se supone que el sistema funcionará con alta velocidad y precisión: para ello iPhone necesitará no más que décimas de segundo. El método será capaz de reconocer al propietario aunque el dispositivo esté simplemente sobre la mesa y no esté cerca de la cara.
El Smartphone Galaxy S8 ya posee tal opción. Sin embargo, los desarrolladores le dejaron el escáner dactilar al aparato.