La ETAK es una batería a base de tritio destinada a alimentar dispositivos autónomos de bajo consumo eléctrico, como sensores, circuitos integrados, radiofaros, 'chips' de memoria y muchos otros aparatos que requieren energía durante largos periodos de tiempo.
Российская батарейка со сроком работы 10 лет сертифицирована https://t.co/KZYSDDUNS1 pic.twitter.com/lUx4LJVSLa
— Я Русский (@yarussru) 21 de enero de 2017
Entre las peculiaridades del producto se destaca la capacidad de funcionar a temperaturas extremas de hasta 60 grados centígrados bajo cero.
"Nuestra fuente de energía puede funcionar bajo duras condiciones climáticas. Además, existe la posibilidad de aumentar la potencia total al emplear varias baterías a la vez", comentó Aleksandr Alekséev, el ingeniero detrás del proyecto, citado en un comunicado publicado por Skólkovo.
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El periodo de investigación y desarrollo ya ha finalizado, y el aparato está listo para la producción en serie. Tras certificar su producto a través del centro Skólkovo, los creadores aspiran convertirse en residentes del tecnoparque moscovita y funcionar dentro de su 'ecosistema' para empresas innovadoras.
