Los especialistas de robótica de la Universidad de Noruega han desarrollado un dispositivo para dar mantenimiento a las plataformas petrolíferas.
El proyecto fue auspiciado por la compañía nacional de petróleo Statoil que planea, de esta manera, aumentar la eficacia de las obras en condiciones adversas de los mares y, al mismo tiempo, reducir los costes reemplazando a los submarinistas humanos.
El robot, inspirado en las anguilas, tiene un cuerpo muy flexible que le permite retorcerse y moverse rápidamente debajo del mar. Además, su forma facilita el mantenimiento y reparación en las zonas de difícil acceso.
Sin embargo, no deja de ser bastante terrorífico y qué suerte ue todavía no lo utilicen en los balnearios.