Doors ha sido inspirado por un problema moderno. Tenemos un mundo real y otro virtual, pero, ¿cómo conectar ambos con una experiencia más elegante que unas enormes gafas de realidad virtual?
"De esta manera, una simple puerta se convierte en la representación de un puente a otros mundos. En este caso, la simplicidad de la metáfora la hace minimalista y permite que llegue [al espectador] como un símbolo", explica el creador de la obra, David-Alexandre Chanel.
La metáfora empleada por Chanel recuerda mucho a la cita de William Blake que dio nombre a una de las bandas más emblemáticas de la historia: The Doors. "Si las puertas de la percepción se purificaran, todo se le aparecería al ser humano como realmente es: infinito".