Sputnik ha intentado descubrir las causas de este fenómeno. La mayoría de los ciudadanos turcos que decidieron dar este paso apuntó a problemas financieros como la principal causa. La imposibilidad de encontrar trabajo, devolver los créditos acumulados y las deudas insuperables lideran la lista.
"Llevo más de dos años sin poder encontrar trabajo. Los problemas materiales crecen cada día. Nadie me quiere dar trabajo. Fui despedido de donde trabajaba antes. Decidí vender mi riñón después de quedarme sin pan para alimentar a mis hijos", confesó un padre de 3 hijos, de la ciudad turca de Sanliurfa.
El hombre, de 29 años, afirmó que su último lugar de trabajo fue una pizzería, pero la paga era muy escasa y pronto tuvieron que despedirlo. Ahora, espera con desespero que alguien responda a su anuncio para comprarle su riñón.
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Otro residente, de la ciudad de Kayseri, decidió vender su órgano después de perderlo todo. Él tenía un próspero club de internet, cuando empezó a tener problemas con la policía.
"La policía realizaba cada vez más revisiones. En tres días llegaron a hacer hasta 12 revisiones. Con el tiempo la cantidad de clientes bajo a cero. Yo iba a la policía, intentaba explicarles que llevo mi negocio de manera legal y sufro de pérdidas por sus constantes revisiones, pero todo en vano", nos contó el hombre de 31 años.
La India es el país que más órganos aporta al mercado negro. Ahí se han dado casos de venta de menores e incluso de sacrificios de algún familiar, quien dona todos sus órganos, para que los demás miembros de su familia puedan subsistir. Los turcos podrían empezar a optar por ese camino, apuntó a Sputnik el doctor Halis Yerlikaya, miembro de la Unión de Médicos de Turquía.
"Desde el punto de vista médico esto supone grandes amenazas. Una persona que desea convertirse en donante de un órgano debe necesariamente someterse a una serie de exámenes. Si el riñón tiene la más mínima falla, a la persona no se le permite ser donante para no dañar aún más su salud ni la del paciente que necesita un trasplante. Cuando tal operación se lleva a cabo ilegalmente, nadie presta atención a estos importantes factores", advierte el doctor.
En los últimos años, la economía de Turquía ha crecido a paso acelerado, superando las medias mundiales. No obstante, el desplome de la lira —la moneda nacional— ha elevado los temores de una inminente crisis que podría afectar las capas más desprotegidas de la sociedad turca.
