"Luego de examinar conjuntamente las opciones para reanudar los diálogos lo más pronto posible, hemos decidido continuar el quinto ciclo en la ciudad de La Habana (Cuba) a partir de la próxima semana", informaron las delegaciones en un comunicado conjunto.
Previamente, Venezuela, Chile, Brasil y Noruega, que actúan como acompañantes de las negociaciones, habían expresado su interés en servir como sede para que se retomaran los diálogos, que se dan de manera pública en Quito desde febrero de 2017 pero que fueron interrumpidos el pasado 18 de abril por el propio presidente de Ecuador, Lenín Moreno.
Ese día Moreno señaló que solicitó a la canciller ecuatoriana, María Fernanda Espinosa, que frenara esas conversaciones y que suspendiera la condición de Ecuador de ser garante de ese proceso de paz "mientras el ELN no se comprometa a dejar de cumplir actividades terroristas".
"Agradecemos las manifestaciones de apoyo por parte de diversas organizaciones de la sociedad y de la comunidad internacional, en especial a los gobiernos que han ofrecido albergar la Mesa de Diálogos, apoyo que valoramos y que tendremos en cuenta en el futuro inmediato", señalaron las partes en el comunicado.
Por su parte, el jefe de la delegación de paz del Gobierno, Gustavo Bell, celebró el anuncio.
"Este anuncio reitera la firme voluntad de la Mesa de seguir trabajando por el desarrollo de la agenda que nos permita suscribir un acuerdo final para terminar el conflicto armado, y nos sitúe en la senda de la Paz que anhelan los colombianos", afirmó Bell, según declaraciones difundidas por la estatal Oficina del Alto Comisionado de Paz.
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Los diálogos de paz entre delegados del Gobierno colombiano y del ELN se llevaban a cabo con el objetivo de alcanzar un armisticio como el logrado con la ahora disuelta guerrilla de las FARC (convertida en partido político de izquierda) y poner fin a más de medio siglo de confrontación armada.
