El proyecto, bautizado como 'dearcatcallers' —queridos piroperos— consiste en publicar 'selfis' en las cuales aparecen al fondo los hombres que piropean a la joven y la cosifican. Como se puede ver en las fotos, las expresiones de ellos y de ella ya dicen mucho acerca de esa costumbre masculina.
"La mayoría de las veces, aparecen con el pulgar hacia arriba, se alegran porque honestamente piensan que me están elogiando. Realmente no se preocupan por mí. Nunca se dieron cuenta de que a mí no me agradaba [su manera de comportarse]", agregó.
Jansma contó que el proyecto le permitió lidiar con los piroperos de alguna manera:
"Ellos invaden mi privacidad y yo la de ellos", señaló la joven.
La joven apuntó que la iniciativa es también una manera de generar conciencia acerca de ese comportamiento presentado frecuentemente por los hombres y que suele ofender a las mujeres.