Según la encuesta, el 62% de los rusos apoya la idea de erigir monumentos o lápidas en memoria de Stalin a lo que se opone el 31% de los encuestados.
El 65% señaló que no ve necesario erigir monumentos que evidencien los fracasos de la época del liderazgo de Stalin, mientras el 28% expresó la opinión contraria.
Los partidarios de conmemorar los crímenes explicaron que la gente debe saber toda la verdad, no solo de los logros (el 39%), el 35% indicó que las represiones estalinistas son parte de la historia (el 35%), mientras el 16% dijo que "de los errores se aprende".
En los últimos años, la figura de Stalin es objeto de una especie de revalorización en la sociedad rusa.
Mientras más de un tercio de los rusos (el 39%) consideran las represiones estalinistas como un crimen político, según reveló un sondeo realizado por el Centro Levada en mayo, para una gran parte de la sociedad los logros económicos de la época tienen un 'peso' comparable a la hora de comparar los logros y los fracasos de su época.