En el zoológico de Lehe Ledu, en la ciudad china de Chongqing, los visitantes son encerrados en un vehículo-jaula en el cual se cuelgan trozos de carne para atraer a los animales.
El automóvil que lleva a los turistas también cuenta con una pequeña apertura a través de la cual los más valientes pueden ofrecer comida a los leones, tigres, osos y otros grandes animales que habitan en el lugar.
"Queríamos dar a nuestros visitantes la sensación de ser acosados y atacados por grandes felinos, pero, por supuesto, sin ninguno de los riesgos que ello supone", dijo el portavoz del zoológico Chan Liang, citado por Daily Mail.
Pese a que la atracción es muy popular entre los turistas que visitan la región, muchos han criticado al zoo y alertado del gran riesgo de accidente que implica esta 'atracción'. Sin embargo, según Liang, a todos los visitantes se les informa de que deben mantener sus dedos y manos dentro de la jaula durante el paseo, pues "un tigre hambriento no conoce la diferencia entre ellos y el desayuno".