El hombre mintió a su amante, mostrándole un certificado falso, en el que se señalaba que el divorcio había tenido lugar. Además, el hombre le había prometido a la mujer llevarla al altar, llegando a asistir a cursos prematrimoniales con su amante, informa el diario. Aunque esto último no es castigable, sí que demuestra la desfachatez del italiano, subraya el diario.
Aunque la mujer conoció a los padres del hombre, su sospecha la llevó a comprobar la validez del certificado, lo que le permitió descubrir que el hombre seguía casado con su exmujer, con la que vivía bajo el mismo techo.
Según el tribunal italiano, el que una persona mienta acerca de su estado civil, en este caso afirmar que se encuentra divorciado, constituye un delito punible, conocido como sustitución de persona. El Código Penal de Italia castiga esta clase de delitos con un año de cárcel.
No te lo pierdas: Dan a conocer cuál es la generación más adicta al sexo
