Defensoras de derechos humanos de Arabia Saudí se dirigieron al gran muftí del país, Abdulaziz bin Abdulá, para pedir que se les permita ponerse al volante, informó hoy la prensa local.
Según las activistas, anteriormente, el jeque bin Abdulá manifestó que los partidarios del levantamiento de la prohibición tenían que elevar su petición a órganos oficiales.
Dado que el muftí es una persona “competente en el asunto”, las saudíes decidieron dirigirse a él.
La respuesta del jeque se hace esperar, confesaron las activistas.
Arabia Saudí es el único país en el mundo donde a las mujeres no se les permite conducir. Desde hace décadas las defensoras de derechos humanos luchan por suprimir la prohibición, pero sus esfuerzos no surten efecto y cada movilización acaba en arrestos masivos de las conductoras desobedientes.
