"Washington decidió mantener sus polígonos nucleares preparados por si reanuda las pruebas, y para no ser objeto de críticas intenta acusar a Rusia", dijo Uliánov a Sputnik.
Sin embargo, a diferencia de Rusia, Estados Unidos no ratificó el Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares.
Además, el desarrollo y despliegue de cargas nucleares de baja potencia están previstos por la doctrina nuclear de EEUU aprobada por la administración Trump.
Según las declaraciones del asesor del subsecretario de Defensa David Trachtenberg, EEUU necesita el armamento nuclear de baja potencia para la contención de Rusia.
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Las relaciones entre Washington y Moscú sufrieron un notable deterioro en los últimos años, en particular por las discrepancias sobre los conflictos de Ucrania y Siria y el despliegue de armas y tropas cerca de las fronteras rusas.