"Creo que en Europa todos se dan cuenta de que justamente Rusia es garante de la seguridad energética del continente", dijo al comentar la situación en torno al proyecto Nord Stream 2.
El vicecanciller ruso constató que hoy en día hay países que pretenden politizar la cooperación en el ámbito de la energía para "obtener una ventaja económica concreta o fortalecer sus posiciones en los bloques occidentales".
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Sin embargo, el Nord Stream 2 "es un proyecto comercial", defendió.
"Su implementación mejorará visiblemente la seguridad energética de Europa, además, está justificado desde el punto de vista financiero y de recursos, algo que se confirma por el hecho de que este año marcó un récord de suministros del gas ruso a Europa, más de 194.000 millones de metros cúbicos", recordó Grushkó.
Mencionó que, de acuerdo con las estimaciones, la demanda del gas de gasoducto, el más competitivo en el mercado europeo, solo aumentará y será un incremento "bastante duradero y muy estable".
El nuevo gasoducto debe pasar en paralelo al ya existente Nord Stream.
EEUU, que tiene en la mira el mercado europeo para su propio gas natural licuado, está presionando a sus socios europeos a que renuncien al proyecto e incluso les amenaza con sanciones.
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El secretario de Estado, Mike Pompeo, dijo antes que EEUU está trabajando "intensamente" con gobiernos y empresarios de la UE para conseguir que abandonen el Nord Stream 2.
