Murieron cuatro mujeres y tres hombres, que recibieron disparos "en tres puntos en un radio de 50 metros", según informaciones de la Brigada Militar de Viamao, consigna el medio.
Según las autoridades policiales, cuatro de los muertos tenían antecedentes delictivos y la principal hipótesis por el momento es que se trató de un ajuste de cuentas entre bandas rivales del narcotráfico.
La Policía considera que la matanza fue planificada porque los objetivos fueron certeros (no hubo heridos) y porque el primero en ser asesinado fue el llamado "ojeador", la persona encargada de vigilar los movimientos sospechosos en la calle donde sucedieron los hechos.
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La Policía Civil (el cuerpo que se encarga de las investigaciones) de Río Grande do Sul informó que movilizará de forma excepcional a cinco agentes durante 15 días para ayudar en las pesquisas.
