Durante el operativo, uno de los terroristas ofreció resistencia y fue abatido por las fuerzas de seguridad.
Según el comunicado, "los edificios gubernamentales de la región de Stávropol y de la agencia de seguridad territorial serían los objetivos de los ataques terroristas".
En el escondite del terrorista abatido se hallaron un fusil con municiones, componentes para explosivos, una bandera del grupo terrorista Estado Islámico, una nota escrita a mano con el juramento al líder del grupo —también conocido como Daesh, prohibido en Rusia— y los planos de los edificios donde se planeaban los atentados.
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En estos momentos, las autoridades realizan un operativo con el fin de encontrar y capturar a sus posibles colaboradores.
