"Las víctimas mortales son 66 en este momento. Otras 35 personas se dan por desaparecidas", precisó el portavoz.
El 13 de agosto se informó de 53 fallecidos.
Las anegaciones y los deslaves cortaron las comunicaciones y el suministro de electricidad en muchas áreas.
Numerosas carreteras están inundadas o cubiertas de escombros debido a los deslizamientos de tierra, lo que obstruye las operaciones de rescate.
Las fuertes lluvias provocaron una crecida peligrosa en buena parte de los ríos en Nepal.
Su evacuación desde las áreas denegadas se lleva a cabo con la ayuda de elefantes domesticados.
Según los partes meteorológicos, las precipitaciones disminuyeron el 13 de agosto en buena parte de Nepal, salvo en Siddharthanagar, en la zona de Terai, y la situación podría mejorar aún mas el 14 o el 15 de agosto.