Según comunicaron fuentes de la cadena, la noche del 3 de agosto los talibanes atacaron un puesto de la guardia fronteriza en la provincia de Zabul.
Agrega que los enfrentamientos, que continuaron hasta la mañana del 4 de agosto, también dejaron a dos guardias heridos y una decena de insurgentes abatidos.
Las autoridades locales siguen sin confirmar los datos sobre los muertos.
Afganistán vive una situación de inestabilidad política, social y de seguridad a raíz de los ataques perpetrados por el movimiento islamista Talibán y, desde 2015, por el autodenominado Estado Islámico, o Daesh, proscrito en Rusia y otros países.