"A la fecha se recibió información de la seccional de Medellín (noroeste) sobre vehículos oficiales que fueron hurtados y se estiman que puedan ser utilizados para ingresarlos a las diferentes sedes con material explosivo", según se lee en un documento remitido a la Dirección Nacional de Protección y Asistencia, y que fue revelado por la emisora RCN Radio.
El comunicado hace énfasis en que el propósito es alertar "sobre posibles atentados en contra de las instalaciones de la Fiscalía General de la Nación".
La alerta se conoció sólo un día después de que un informe de inteligencia de la Policía también se filtrara a los medios e indicara que la banda criminal Clan del Golfo (disidencia de los paramilitares) prepara un atentado con vehículo bomba en Medellín y/o en Bogotá.
Dicha agrupación "estaría coordinando la adecuación de un vehículo con artefactos explosivos para generar una acción de impacto contra la Fuerza Pública a nivel nacional", se lee en el reporte de inteligencia de la Policía referido al Clan del Golfo.
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El 12 de mayo la Defensoría del Pueblo de Colombia, a través de su Sistema de Alertas Tempranas, advirtió que identificó un escenario de posibles ataques y atentados contra agentes de la policía en varios departamentos del país por parte de grupos paramilitares y de la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional, el cual denominó "plan pistola".
"Esta alerta se da en los departamentos de Chocó, Antioquia (noroeste), Cauca, Nariño (suroeste), Arauca, Norte de Santander (nordeste), Cesar, Córdoba (norte), Cundinamarca y en el Distrito Capital Bogotá (centro)", indicó el organismo en un breve comunicado.
El Clan del Golfo, antes denominado Clan Úsuga, surgió de grupos disidentes del paramilitarismo luego de que el grueso de esta estructura se desmovilizara en 2006 tras un acuerdo con el Gobierno, tiempo desde el cual se dedica al narcotráfico, la minería ilegal y la delincuencia común.
Durante el 2017 la Policía ha capturado a más de 1.300 miembros de esta banda y dado muerte a 52 de sus cabecillas.