"Los datos reunidos atestiguan que no era una doble explosión sino dos chasquidos (…), el mecanismo estuvo dotado de reloj pero no tenía dispositivo de ondas de radio", señaló.
La explosión se produjo en la parte céntrica de la capital italiana, fue un explosivo rudimentario colocado entre dos autos aparcados cerca de una oficina de correos, no hubo muertos ni heridos.
La fiscalía romana abrió el expediente penal, como una de las versiones preliminares se estudia una protesta anarquista, informó el canal de televisión Rainews24.
Minutos después de producirse esta explosión llegó la noticia de que se detectó otro explosivo cerca de la oficina romana de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación (FAO), pero luego se averiguó que no era bomba sino unos sacos con arena.