Arrieta Granados quedó gravemente herido de cuatro balazos, tras ser atacado al llegar a su domicilio, después de cerrar la edición del rotativo donde trabaja, y fue internado en el hospital del Seguro Social de Poza Rica, donde su estado de salud fue reportado grave, dijo el noticiario.
El periodista quedó tendido en el suelo en el portón de la cochera de su casa a medio cerrar, con una herida de bala que perforó un pulmón, dijo por su parte el semanario nacional Proceso.
Un agente de seguridad en la sede del periódico, consultado vía telefónica por Sputnik Nóvosti, declinó ofrecer información sobre el estado de salud del directivo del diario, y dijo que "no hay ningún periodista de la redacción en este momento".
"Su estado de salud es grave, reportaron colegas" del directivo del periódico regional a Proceso, que relataron que a su domicilio llegaron una patrulla de la Fuerza Civil y elementos de la Cruz Roja hacia las 03.00 de la madrugada (9.00 GMT), para llevarse al periodista a una clínica y luego al hospital del Seguro Social.
Tres profesionales de medios de comunicación han sido asesinados en menos de un mes en este país: Ricardo Monluí Cabrera, en Veracruz, Cecilio Pineda, en Guerrero (sur), y Miroslava Breach, corresponsal del diario nacional La Jornada en Chihuahua (norte).
Desde 2000 han sido asesinados 120 periodistas y otros 20 se encuentran desaparecidos, de acuerdo con un informe de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP).
México es considerado uno de los países más peligrosos para ejercer el periodismo en el continente americano.