"La investigación estableció que en el poblado de Gonio (Ayaria, al oeste de Georgia) el presidente del Tribunal de Tiflís, Gueorgui Mikautadze, fue objeto de ofensas verbales y físicas, además de amenazas de muerte y daños a su salud", indica la declaración.
En consecuencia se abrió una causa penal en base a los incisos 3 y 5 del código penal de Georgia, referentes a las amenazas o violencia relacionadas a un proceso penal o una investigación, cometidas por un grupo de personas con el uso de la violencia, lo cual conlleva a penas de privación de libertad de 7 a 10 años.