"Las capacidades del nuevo sistema permiten detectar objetivos en el aire a distancias de más de 600 kilómetros y superan en eficacia de combate los sistemas antiaéreos extranjeros", destacó.
Según el oficial, los S-400 se desplegaron en Kamchatka en sustitución de sistemas S-300, que "habían protegido el espacio aéreo ruso durante más de un cuarto de siglo", subrayó.
Cada grupo consta de más de 200 unidades de material bélico y piezas de recambio, incluidas torres de 40 metros para los radares.
Según está previsto, la península siberiana recibirá en total más de 20 de estas lanzaderas en cinco envíos.
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Los S-400 Triumf (SA-21 Growler, en la clasificación de la OTAN) son capaces de abatir blancos aéreos de tecnología furtiva, misiles de crucero de pequeño tamaño y nuevos misiles balísticos tácticos y táctico-operativos.
El sistema, a disposición del Ejército desde el año 2007, puede destruir simultáneamente hasta 36 blancos con sus 72 misiles.
