De acuerdo con el médico dietético ruso Mijaíl Ginzburg, director del Instituto de Investigación de Dietética y Dietoterapia de Samara, es más fácil adelgazar en el mismo verano que antes de que inicie la estación. Eso se debe a que, cuando hace calor, el apetito de las personas se reduce notablemente.
"Se puede decir que los alimentos tienen un componente térmico. El organismo descompone los alimentos a través de la oxidación, y la oxidación se acompaña de la liberación de energía. Una parte de la energía es atrapada por las moléculas de ATP, y una parte no, por lo que las personas sienten calor después de comer. Si ya hace calor alrededor, entonces no se necesita energía adicional", explicó Ginzburg en una entrevista con radio Sputnik.
El médico apuntó, además, que en los meses de verano, bajamos de peso de manera casi que involuntaria, ya que, de cierta manera, "nos secamos".
11 de julio 2020, 13:10 GMT
"La cantidad de agua que llevamos en nuestro organismo se reduce. Por lo general, el peso disminuye simplemente por el calor y no por esfuerzos especiales. En el calor, las personas suelen perder un kilogramo y medio de peso de esa manera", apuntó el médico.
Es importante tener en cuenta, sin embargo, que los esfuerzos para adelgazar, sean ellos cuales sean, deben estar siempre acompañados de ayuda médica. Solamente un profesional entrenado para ello podrá decir cuál dieta es mejor para la salud de tu organismo.
