"Todo el territorio brasileño será área de recomendación para la vacuna de la fiebre amarilla (…) la ampliación se realizará de forma gradual, empezando este año y siendo concluida en abril de 2019", informó el ministerio de Salud en un comunicado.
Los estados de São Paulo (sureste), Río de Janeiro (sureste) y Bahía (noreste), que hace meses que vacunan a parte de población, serán los primeros en extender a todos los municipios la protección contra la enfermedad.
En julio de este año adoptarán la vacuna los estados de Paraná, Santa Catarina y Río Grande do Sul (sur de Brasil), y en enero de 2019 la campaña se extenderá a los estados de Piauí, Paraíba, Pernambuco, Ceará, Alagoas y Sergipe (noreste) y a Río Grande do Norte (norte).
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Para atender la demanda del país en los próximos años el ministerio de Salud pidió al laboratorio productor de la vacuna, Bio Manguinhos-Fiocruz, en Río de Janeiro, aumentar las dosis para 2019; la ampliación no alterará el número de dosis previstas para este año, que es de 49 millones.
Entre el 1 de julio de 2017 y el 13 de marzo de 2018 Brasil confirmó 920 casos de fiebre amarilla en el país, de los cuales 300 desembocaron en muerte.
En total se notificaron, durante ese periodo, 3.483 casos sospechosos, de los que 1.794 fueron descartados y 769 permanecen en investigación.