La ministra interina de Sanidad, Uliana Suprún, informó a través de su cuenta de Facebook que propone prohibir totalmente la importación de medicamentos de Rusia. Una solicitud formal ya ha sido enviada al Gobierno de Ucrania.
"Estamos en guerra con el país. Es incorrecto proporcionar más fondos de nuestro presupuesto a su economía comprando medicamentos", anunció la funcionaria.
Lea más: Vice primer ministro de Ucrania recomienda a la población no consumir gas
Además, aseguró que el veto en los suministros desde Rusia no va a perjudicar en modo alguno a los pacientes en Ucrania, alegando que es posible encontrar sustitutos dentro del país o comprarlos en el exterior.
"Todas las licitaciones estatales ya se enviaron a las organizaciones internacionales", afirmó Suprún.
Sin embargo, la situación real aparentemente es más complicada. De 229 fármacos populares entre la población ucraniana, el país es capaz de producir (o ha permitido ventas de sus análogos) sólo 103 fármacos. Es más, los medicamentos que se venden por parte de empresas farmacéuticas extranjeras no siempre son de alta calidad y cuestan mucho más, informa el diario Vzglyad. Por ejemplo, después de la muerte de niños ucranianos vacunados con fármacos de Asia, muchas familias en Ucrania han decidido abandonar la vacunación de sus hijos.
Cabe recordar también la devaluación de la grivna —la moneda nacional ucraniana—, por lo que aumenta aún más el precio. Esto perjudica, en primer lugar, a los sectores más vulnerables y desfavorecidos de la sociedad ucraniana.
Según los datos oficiales del país, los precios en los productos farmacéuticos han subido un 120% en los últimos tres años, mientras que los salarios y pensiones siguen cayendo.
"Tal decisión significaría para el pueblo ucraniano que los precios de fármacos aumentarían ya en los próximos días. Además, costarían más los mismos medicamentos ucranianos porque se producen de materiales importados de Rusia", advirtió Alexandr Kortunóvich, economista ucraniano.
Además de las razones de política exterior, también surgen otras. Así, después de aparecer el mensaje de Suprún en Facebook, el primer ministro de Ucrania, Vladímir Groisman, apoyó públicamente la
