"El Gobierno de nuestro país está en contacto permanente con los dirigentes de Azerbaiyán y Armenia, coordinando el trabajo para la solución posconflicto", dijo en su rueda de prensa tradicional.
Además, Zajárova declaró que Moscú está detectando intentos de distorsionar lo que está pasando en torno al acuerdo tripartito sobre Nagorno Karabaj.
"Detectamos un silenciamiento informativo, tal vez una distorsión informativa, de lo que está pasando en torno a la implementación del acuerdo tripartido sobre Nagorno Karabaj", dijo.
Por acuerdo entre las partes, Rusia envió sus fuerzas de paz a la zona del conflicto, por cinco años en un principio. El despliegue de este contingente, de unos 2.000 efectivos, se lleva a cabo paralelamente a la retirada gradual de fuerzas armenias desde los distritos de Agdam, Kelbecer (Kalbajar) y Lachín, ocupados durante la guerra de 1992-1994.
Los militares rusos ejercerán el control en la línea divisoria entre las fuerzas armenias y azeríes, así como en el corredor de Lachín que conecta a Nagorno Karabaj con Armenia. Por su parte, Armenia deberá garantizar el transporte entre la república autónoma de Najicheván, el exclave azerí que se encuentra entre su territorio, Irán y Turquía, y las zonas del oeste de Azerbaiyán.