"En las últimas 24 horas murieron 135 personas (...) En total son 2.972 muertos", dice el comunicado.
Durante la pasada jornada "en Rusia se han confirmado 8.764 nuevos casos de COVID-19 en 84 (de las 85) regiones, incluidos 4.021 casos asintomáticos (45,9%)".
En Moscú se detectaron 2.699 nuevos casos en un día, elevando la cifra total de contagiados en la capital a 152.306, lo que corresponde al 49,3% de las infecciones a nivel nacional.
El centro operativo que controla la situación del coronavirus en la capital rusa informó que "el 40,5% de los nuevos infectados en Moscú son personas de 18 a 45 años; el 34%, de 46 a 65 años; el 10,7%, de 66 a 79 años; y el 6,2%, mayores de 80 años".
Además, el 8,6% de los nuevos contagiados son niños.
Un total de 85.392 personas se recuperaron de la enfermedad, incluidas 9.262 que recibieron el alta médica en las últimas 24 horas.
Factores que ayudaron reducir el número de contagios
El tiempo veraniego y el cumplimiento del régimen de autoaislamiento llevaron a la disminución de nuevos casos del coronavirus SARS-CoV-2 detectados diariamente en Rusia, afirmaron a Sputnik expertos rusos.
"La mayor parte de las personas cumple las normas antiepidémicas, lo que provocó la caída, pero también creo que el clima de verano tuvo su papel. El efecto general del verano conduce a una mayor inmunidad", dijo el virólogo y doctor en ciencias médicas Anatoli Altshtein.
A su vez, el infectólogo Nikolái Málishev considera que la violación del confinamiento puede conducir a un repunte de nuevos casos de COVID-19.
Si se mantiene un escenario favorable, "podemos esperar números mínimos a fines de junio o a principios de julio, muy probablemente en ese momento", señaló Málishev.