Miembros de la Policía vigilan a los ciudadanos de Moscú para que permanezcan en sus casas y muestren la responsabilidad social que están obligados a respetar y protejan su salud y la de sus familias.
Sputnik pasó un día con dos sargentos de la Policía, Anastasía Medvédeva y Oleg Bulgar, para saber en qué consiste su trabajo.
"El código administrativo de Moscú prevé multas por violar el régimen de autoaislamiento. Sin embargo, ahora llevamos a cabo charlas de prevención para convencer a los ciudadanos de mostrar conciencia y responsabilidad social y a quedarse en casa", comenta Medvédeva.
"Sin duda, es muy sorprendente ver la ciudad vacía. Lo único que me alegra es que la gente racional está en sus casas. La enfermedad es muy seria, y nos alegra que la gente lo entienda", agrega Bulgar.