"El Gobierno analiza continuamente la situación y dependiendo de la evolución estructurará las medidas de estímulo", dijo el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
El 2 de abril el presidente de Rusia, Vladímir Putin, extendió el periodo no laborable hasta el 30 de abril para impedir la propagación del virus. La suspensión de la actividad laboral vencía el 5 de abril.
Peskov indicó que "la situación es realmente complicada" y se escuchan distintos pronósticos de los economistas., algunos incluso muy pesimistas.
El portavoz insistió en que el Gobierno, encabezado por el primer ministro Mijaíl Mishustin, trabaja en los planes con anticipación para capear el temporal.
En concreto, las autoridades monetarias del país ya tomaron una serie de medidas para mitigar el impacto del coronavirus.