"El novísimo navío Ingushetia zarpó de Novorossiisk [puerto ruso del mar Negro] para efectuar las pruebas en marcha, será su primera navegación después de construido y botado", dijo.
La tripulación deberá verificar si es fiable el funcionamiento de sus sistemas energético, de maniobra, de comunicaciones, de navegación y otros, explicó.
Las corbetas de esta clase tienen 74,1 metros de eslora; 11 metros de manga y un desplazamiento de casi 1.000 toneladas y están dotadas de novísimos sistemas de cohetes de crucero Kalibr-NK, de gran alcance y elevada precisión.
La misión principal de los navíos del proyecto Buyán-M consiste en proteger las zonas industriales del país.
Son buques de la clase "río-mar", lo que les permite trasladarse, por ejemplo, del mar Negro al mar Báltico por arterias fluviales de Rusia.