El Día de la Armada de Rusia es una fiesta nacional que se celebra anualmente a lo largo y ancho del país, el último domingo de julio. La festividad fue establecida por primera vez en 1939 y luego cancelada en 1980. En 2006, un decreto de Vladímir Putin retomó las conmemoraciones. Desde 2017, la ciudad de San Petersburgo se ha convertido en la sede principal del evento y alberga un desfile que muestra la más modernas embarcaciones de la Marina de Guerra rusa, al lado de importantes buques militares históricos, escribió Mark Episkopos, autor del artículo de NI.
En el desfile naval petersburgués de 2019 se destacó la ausencia de algunas importantes embarcaciones. El portaviones Almirante Kuznetsov no participó del evento, como era de esperar, ya que pasa por una gran reforma actualmente. Por otro lado, la ausencia del crucero nuclear Pedro el Grande, el buque militar de superficie más grande del mundo y la estrella del desfile del Día de la Armada de 2017, sí que causó sorpresa, apuntó el columnista.
Para el medio estadounidense, sin embargo, el hecho de que el buque no participara en el desfile es lógico en el contexto de que Rusia trató de demostrar que la Armada del país se está convirtiendo gradualmente en una "flota ligera, local y de respuesta rápida".
Episkopos destacó la participación en el evento de la fragata Almirante Kasatonov, la segunda embarcación de la serie 22350 y de la corbeta Gremyashchiy, el buque insignia de la serie 20385.
El autor del texto se sorprendió, sin embargo, que entre todos los prototipos de submarinos que podrían participar en el desfile, la flota rusa eligió precisamente el submarino Kronstadt de la serie Lada. Esto podría significar que el país está avanzando en el desarrollo delsistema de propulsión independiente de aire (PIA) usado en esta embarcación o sencillamente un "guiño" a la base naval Kronstadt, justo al oeste de San Petersburgo.
"Los misiles modernos, que son en primer lugar los misiles de crucero del tipo Kalibr, se han vuelto compactos, mientras que cubren una distancia muy grande de hasta unos 2.000, 2.500 kilómetros. Pueden ser convenientemente colocados en pequeños buques de guerra debido a que estas embarcaciones tienen una buena navegabilidad. Pueden ubicarse tanto en aguas territoriales como en pequeños cuerpos de agua donde existen las condiciones para su manutención", afirmó el excapitán Leonid Yudnikov, citado por el medio.
Este enfoque pragmático en embarcaciones pequeñas y rentables es lo que ha sostenido el amplio programa de modernización de la Armada rusa, apuntó Episkopos. Según el discurso de Putin el día del desfile, "el nivel de armamentos y equipos militares modernos de la Armada rusa supera el 62%".
Episkopos subrayó que todavía una parte sustancial de este 62% se trata de buques de la era soviética que han sido reacondicionados con armamentos o dispositivos electrónicos modernos.
"Sin embargo, la pequeña y ligera composición del desfile naval de 2019 ilustra que, en las últimas décadas, la Armada rusa ha dado pasos significativos, aunque a veces dolorosos, para allanar el camino para nuevos proyectos, al jubilar grandes partes de su herencia naval soviética", concluyó.
