"El submarino Kolpino de la Flota del mar Negro completó sus tareas como parte de la agrupación permanente de la Armada en el mar Mediterráneo y partió rumbo a su base permanente, la ciudad-héroe de Novorossiysk", dijo el portavoz de la flota, Alexéi Ruliov.
El Kolpino, un submarino diésel-eléctrico del proyecto 636.3, desplaza 3.950 toneladas y puede navegar a una velocidad de hasta 20 nudos y descender a 300 metros de profundidad.
Tanto él como sus similares son capaces de detectar la presencia enemiga a distancias tres y hasta cuatro veces superiores al alcance que tienen submarinos análogos de otros países.
Su armamento incluye 6 tubos lanzatorpedos de 533 milímetros, minas y sistemas de misiles Kalibr.