De este modo, se prohíbe difundir en redes informativas de telecomunicación información de trascendencia pública de dudosa fiabilidad haciéndola pasar por comunicados fidedignos y que peligre la vida y la salud de los ciudadanos, o que ponga en riesgo sus bienes.
Después de detectar este tipo de información, el fiscal general de Rusia o sus adjuntos solicitarán al regulador de los medios de comunicación, Roskomnadzor, que tome medidas para limitar el acceso a los recursos que difunden información falsa.
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Roskomnadzor deberá bloquear la página web del ente que distribuya tal información, si esta no queda eliminada inmediatamente tras el aviso correspondiente.
Al mismo tiempo, si la información que viola la ley se elimina tras el aviso, Roskomnadzor restablecerá el acceso al sitio web del medio.
Putin también firmó este 18 de marzo la ley que prohíbe distribuir información ofensiva para la sociedad, el Estado y los símbolos estatales.
Según la ley, la difusión de este tipo de información se castigará con una multa de entre 30.000 y 300.000 de rublos (unos 500 y unos 5.000 dólares).
La reiterada violación de esta ley podría castigarse además con 15 días de prisión.