"Estamos dispuestos a ayudarle a Yakarta a construir un sistema de alerta de desastres naturales", apuntó Rogozin en su cuenta de Twitter.
Al menos 281 personas perdieron la vida, 1.016 resultaron heridas y 57 se dan por desaparecidas después de que un tsunami de origen volcánico golpeara el 22 de diciembre las zonas costeras a ambos lados del estrecho de Sonda, entre las islas de Java y Sumatra, según los datos que publicó la Agencia de Mitigación de Desastres de Indonesia (BNPB).
Algunos expertos indonesios como el investigador del Instituto de Tecnología de Bandung, Hamzah Latief, opinan que, si los sensores de actividad volcánica hubieran funcionado correctamente, las autoridades habrían tenido al menos 15 minutos para alertar a los residentes y evacuarlos hacia zonas seguras.