"Rusia y los países que apoyan nuestra postura no están de acuerdo con esa decisión", dijo Kalamánov.
A la pregunta sobre una posible salida de Rusia de la organización Kalamánov respondió que "es prematuro hablar sobre esto pero, efectivamente, Rusia tendrá que sacar conclusiones".
Subrayó que Rusia, por su parte, cumplió sus compromisos ante la organización y todo el mundo y "todos lo saben y confirman".
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El embajador ruso ante la OPAQ, Alexandr Shulguín, a su vez propuso no adelantarse en lo que se refiere a una posible reacción de Moscú en el sentido de restringir las contribuciones rusas al presupuesto de la organización.
"Ahora es necesario limitar el daño de la decisión aprobada, nos alegra que el número de nuestros amigos aumente", comentó al señalar que la coalición occidental encabezada por EEUU fracasó en su plan de aislar a Rusia.
El embajador ruso afirmó que a EEUU y sus aliados no les gusta la postura rusa en el Consejo de Seguridad de la ONU y buscan saltarse el veto de Rusia para debilitarla como un actor internacional y hacer que "la mayoría dócil" cumpla todos los caprichos estadounidenses.
"Haremos todo lo posible para prevenir más daños a la Convención [sobre las Armas Químicas] porque los estadounidenses, como ya hemos visto, echan a perder la Convención", agregó.
Este 20 de noviembre 99 países miembros de la OPAQ votaron a favor del aumento del presupuesto de la organización, mientras que 27 miembros votaron en contra.
También repudió la iniciativa ruso-china para evaluar la legitimidad de la creación de ese mecanismo.
En junio pasado los miembros de la OPAQ, reunidos en una sesión especial en La Haya, aprobaron la propuesta británica de ampliar el mandato de la organización.
Rusia se opone a la ampliación de las funciones de la OPAQ, alegando que identificar a los culpables del uso de armas químicas corresponde solo al Consejo de Seguridad de la ONU.