De acuerdo con L'Echo, a mediados del año pasado, la aerolínea arrendó cuatro Sukhoi Superjet 100 a su homóloga irlandesa CityJet por un plazo de dos años. Sin embargo, debido a que el fabricante de la aeronave no pudo reparar rápidamente un Superjet y los vuelos se cancelaron, los belgas decidieron rescindir el contrato antes de lo previsto, informó L'Echo.
Anteriormente, la aerolínea mexicana Interjet, principal comprador internacional de los Sukhoi Superjet 100, anunció que vendería los aviones. La razón son los problemas con el servicio posventa.
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Boris Rybak, director general de la consultora Infomost, consideró que este es "el principal problema de este avión". Recordó que la aerolínea rusa Aeroflot e Interjet se han quejado del servicio. La empresa aérea Yakutia también ha criticado duramente el sistema de soporte técnico de los SSJ-100, agregó.
"Se formó un sistema de soporte técnico bastante exótico para el servicio posventa, que no corresponde a la maneras modernas de cómo se hace esto. Se tomaron muchas decisiones inusuales que no son típicas en el mercado global de mantenimiento", afirmó Rybak al portal Bfm.ru.
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Para Rybak, el problema principal es que Sukhoi se responsabiliza de todos los procesos de mantenimiento y de suministro de repuestos y componentes, sin contar con los recursos suficientes para hacerlo.
"Una aeronave tiene una gran cantidad de sistemas con una enorme cantidad de componentes. La propia Sukhoi suministra estos componentes y elementos de sistemas. Lo hace de manera lenta y cara. Pero lo principal es que son lentos", detalló.
"No temo decir que otros errores han sido cometidos. Pero este es probablemente uno de los fundamentales. No hay nada sorprendente. Sukhoi es un fabricante de aviones militares que se mantienen en operación de una manera ligeramente diferente. La compañía nunca ha creado sistemas de servicio posventa para aviones comerciales. No tienen experiencia en este asunto", concluyó Rybak.