"En particular, se abordaron las cuestiones de energía y el impacto de las sanciones", dijo Nóvak a los periodistas en Washington.
Agregó que durante la reunión también se abordaron los proyectos concretos de las compañías estadounidenses en Rusia que fueron suspendidos debido a las sanciones de Estados Unidos.
"Nos reunimos con Perry y abordamos las cuestiones de cooperación bilateral entre nuestros países en el ámbito energético, el estado actual y las oportunidades para la cooperación, la participación y el trabajo de compañías estadounidenses en el mercado ruso, incluidas las empresas como ExxonMobil, Schlumberger, Halliburton, Honeywell y otras (…) examinamos el impacto de las sanciones en estas compañías", dijo Nóvak.
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Añadió que se abordó "la posibilidad de ampliar la cooperación, en particular en cuestiones relacionadas con la promoción de gas como el producto menos contaminante en los mercados mundiales, tanto en forma de gasoductos como en forma de gas natural licuado".
El gasoducto debe pasar por las zonas económicas de Alemania, Dinamarca, Finlandia, Rusia y Suecia.
Varios países, como EEUU, Ucrania y Polonia consideran que la construcción del gasoducto amenaza la seguridad de la Unión Europea.
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El secretario de Energía de EEUU, Rick Perry, podría participar en la Semana de la Energía de Rusia, un foro internacional sobre eficiencia energética y desarrollo de la energía, comunicó Nóvak.
"Le invité a la Semana de la Energía de Rusia que se celebrará en Moscú del 3 al 6 de octubre de 2018, es posible que mi colega visite nuestro foro energético", dijo Nóvak a la prensa.
En agosto de 2017, el Gobierno estadounidense promulgó una ley para ampliar sus sanciones unilaterales a Rusia y otros países a los que considera "adversarios".
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De esta manera, la ley deja la puerta abierta a las sanciones contra las compañías europeas, entre ellas la alemana BASF, por colaborar con Moscú en el sector energético, en concreto en el proyecto Nord Stream 2.