Como consecuencia, Rousseau debió buscar un queso en Rusia, lo que lo llevó hasta una granja en la ciudad de Istra, a unos 60 kilómetros de la capital rusa, Moscú.
"Necesitamos mucho queso, todo el que pueda necesitar la selección de Francia, son varios centenares de kilogramos para todo el tiempo [del Mundial]", explicó Sirota.
La cantidad tan grande de queso refleja la actitud del equipo francés que, al parecer, tiene planes muy ambiciosos para este Mundial y se aprovisiona para sobrevivir sin el brie y el camembert francés hasta el final del Campeonato.
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"Se abastecen hasta el final de la Copa, tienen todas las cosas programadas para el mes entero, es que la selección de Francia tiene previsto salir victoriosa en el Mundial. Lo entendí de las palabras del chef y la cantidad de comida en relación al número de días", dijo el granjero ruso.
Según el entrevistado, Xavier Rousseau seleccionó quesos blandos, en particular, una variedad muy popular. El chef también se interesó en los yogures producidos por la granja, por lo que se enviaron varias cajas al equipo galo.
Sirota cree que el interés del cocinero galo por sus quesos demuestra la alta calidad de sus productos.
"No voy a mentir, tenemos planes de empezar a exportar nuestros productos para finales de este año", indicó.
El granjero también agregó que el primer país al que exportará sus productos será Alemania. Luego, planea salir al mercado francés porque "tiene mucha importancia" para su negocio.
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En respuesta a las sanciones impuestas por EEUU y varios países europeos después de la crisis en Ucrania y la reunificación de Crimea con Rusia en 2014, Moscú impuso el embargo alimentario a varios productos provenientes de la UE.