"Defenderemos la verdad y los derechos legítimos de nuestros deportistas limpios", dijo Lavrov.
La estrategia busca aumentar la competitividad del deporte ruso, defender los intereses de los atletas, luchar contra la discriminación y fomentar la cooperación con las organizaciones internacionales para superar los desafíos y amenazas actuales en el ámbito de deporte.
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Por su parte, Kolobkov expresó la esperanza de que esa estrategia permita resolver muchos problemas, entre ellos la "denegación de los visados a los deportistas (rusos) lo que es una violación directa de los derechos de atletas".
Hablando del movimiento deportivo, el jefe de la diplomacia rusa destacó que este "debe guiarse por intereses de los deportistas y no por cualquier tipo de juegos burocráticos, intereses de la lucha política o estimaciones geopolíticas" o intentos de aislar o castigar a alguien.
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El canciller aseveró que el Ministerio de Exteriores junto con el de Deporte y otros organismos trabajarán juntos para conseguir la depolitización del deporte.
La embajada de EEUU en Moscú denegó en marzo los visados a la selección rusa de lucha libre que quería dirigirse a EEUU para disputar la Copa Mundial.
