No obstante, a pesar de la disponibilidad del vehículo, el presidente ha decidido dejarlo fuera por razones no especificadas. Por su parte, la Oficina de Diseño NAMI, cuyo socio de producción es la empresa Sollers, ha cumplido con todas sus obligaciones de producir el automóvil a tiempo y pasar todas las pruebas de seguridad.
El ministro ha explicado que: "La decisión de cuando hará nuestro presidente uso de este automóvil no depende de nosotros".
El proyecto Kortezh supone el desarrollo de una familia de automóviles sobre una base modular: una limusina, un sedán y un monovolumen. Todos ellos destinados a altos funcionarios del Estado, pero también estarán disponibles para su compra a partir del año que viene. De hecho, los especialistas podrán familiarizarse con los vehículos en el Salón Internacional del Automóvil de Moscú en septiembre de 2018. En total, la inversión estatal realizada en el proyecto asciende a los 12.400 millones de rublos (unos 200.000 dólares).
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