El veredicto autoriza al demandante, la autoridad reguladora rusa de los medios de comunicación Roskomnadzor, a bloquear la aplicación con carácter inmediato hasta que entregue las claves.
El pasado 20 de marzo el Tribunal Supremo de Rusia desestimó la demanda de Telegram de invalidar una orden del Servicio Federal de Seguridad (FSB) que le obliga a facilitar las claves de cifrado bajo el argumento de que la aplicación es ampliamente usada por los terroristas.
Roskomnadzor anunció en la misma fecha que bloquearía Telegram a menos que entregara al FSB los datos necesarios en un plazo de 15 días, que ya venció.
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El FSB, a su vez, objetó que la información solicitada no contiene datos que constituyan secreto de correspondencia.
El portavoz del grupo internacional de abogados pro derechos humanos Agora, Dmitri Kolbasin, dijo a Sputnik que "lo importante ahora es recibir la resolución judicial y examinarla".
"Nuestros abogados planean recurrirla, desde luego", añadió.
El asesor del presidente ruso para asuntos de internet, Guerman Klimenko, celebró la resolución del tribunal.
"Se ha dado un paso muy importante hacia la defensa de los intereses del Estado", resaltó.
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Klimenko auguró una inminente "carrera de armas" entre Telegram, que intentará crear canales para evadir el bloqueo, y la autoridad reguladora, que va a combatirlos.
"En lo que a mí respecta, apostaría por Roskomnadzor", añadió.
Por su parte el portavoz del presidente ruso, Dmitri Peskov, declaró que el Kremlin no comenta la posible suspensión de Telegram, ya que se trata del veredicto de un tribunal.
"Se trata de la decisión de un tribunal, no la comentaré de ninguna manera", dijo Peskov en una rueda de prensa.