Cuatro diplomáticos rusos deberán abandonar Canadá en un plazo de diez días

MOSCÚ (Sputnik) — El ministro de Transporte de Canadá, Marc Garneau, declaró que cuatro diplomáticos rusos deberán abandonar el país en un plazo de 10 días en señal de solidaridad con el Reino Unido, informó el periódico Presse.

"Tomamos la medida de expulsar a cuatro diplomáticos rusos, tres de los cuales trabajan en el Consulado de Montreal y uno en Ottawa", declaró ante el Parlamento de Canadá, al señalar que los diplomáticos tienen 10 días para marcharse del país.

Además, se detuvo la entrega de permiso de trabajo para otras tres personas.

El 26 de marzo Canadá anunció la expulsión de cuatro diplomáticos rusos y decidió denegar tres solicitudes de Moscú para personal adicional en el país a raíz del envenenamiento del exagente doble ruso Serguéi Skripal y su hija Yulia en Reino Unido.

Ayer, 16 países de la Unión Europea, así como Estados Unidos, Albania, Ucrania, Noruega, Macedonia y Australia anunciaron la expulsión de diplomáticos rusos por el caso Skripal.

Por su parte, el Gobierno de Islandia decidió suspender temporalmente el diálogo bilateral con las autoridades rusas.

Encuesta: ¿Qué consecuencias tendrá el reciente anuncio de expulsión masiva de diplomáticos rusos de los países occidentales?

Skripal, exoficial de inteligencia militar rusa reclutado en los años 90 por el servicio secreto británico MI6 y naturalizado en el Reino Unido, y su hija Yulia fueron hallados inconscientes el 4 de marzo cerca de un centro comercial en la ciudad de Salisbury (sur).

Ambos continúan en estado crítico y reciben tratamiento por intoxicación con una sustancia de acción neuroparalizante.

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El 14 de marzo, la primera ministra británica Theresa May responsabilizó a Moscú de lo ocurrido en Salisbury —que calificó de intento de asesinato— y anunció, como represalia, la expulsión de 23 diplomáticos rusos y la cancelación de todos los contactos de alto nivel entre ambos países.

Moscú, que rechazó todas las acusaciones por infundadas, exigió en respuesta la salida de 23 empleados de la Embajada británica, además de anunciar el cierre del consulado británico en San Petersburgo y de la oficina del British Council en Moscú.